
Nueva York (Naciones Unidas)-. Las Naciones Unidas han vuelto a ratificar el estatus jurídico del Sáhara Occidental como territorio no autónomo pendiente de descolonización.
Esta situación jurídica del Sahara Occidental como territorio ocupado y no autónomo pendiente del proceso de descolonización es respaldada por la Unión Africana que la considera como la última colonia en África.
El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, presentó su informe anual sobre el Sáhara Occidental durante el 80.º período de sesiones de la Asamblea General, en el que reiteró que el conflicto sigue figurando en la agenda de las Naciones Unidas como una cuestión de descolonización y que requiere «una solución política justa, duradera y aceptable para las partes que garantice el derecho del pueblo del Sáhara Occidental a decidir su destino» (párrafos 28 y 29).
El informe señala que la situación actual es «preocupante e insostenible» y advierte del peligro que supone el estancamiento político y la escalada de enfrentamientos militares, que amenazan la paz y la seguridad regionales. El secretario general instó a las partes en conflicto, el Frente Polisario y Marruecos, a «cambiar de rumbo sin demora» y a reincorporarse al proceso político de las Naciones Unidas liderado por su enviado personal, Staffan de Mistura, con el objetivo de alcanzar una solución definitiva basada en las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad.
Esta propuesta de la ONU constituye una respuesta directa a los intentos de la potencia ocupante marroquí y algunos de sus aliados de presentar el conflicto como una cuestión «interna» o una mera «disputa territorial». El reconocimiento reiterado del derecho a la libre determinación reafirma la referencia jurídica internacional que considera al pueblo saharaui como la parte legítima y titular del derecho a decidir el futuro del territorio mediante un referéndum libre y justo, y supone un duro golpe para los intentos de la Estado ocupante marroquí y algunos de sus aliados de eludir estas realidades jurídicas.
Estas conclusiones confirman, en opinión de los observadores, que las Naciones Unidas siguen considerando que la solución política depende de la libre voluntad del pueblo saharaui y no de las políticas de facto que el Estado ocupante intenta imponer por la fuerza y mediante proyectos unilaterales en los territorios ocupados.
Incluido desde 1966 en la lista de territorios no autónomos, y por lo tanto elegible para la aplicación de la Resolución 1514 de la Asamblea General de la ONU sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales, el Sáhara Occidental es la última colonia de África, ocupada desde 1975 por Marruecos, apoyado por Francia.
Tras cinco décadas de reconocimiento y apoyo a la autodeterminación del pueblo saharaui, es hora de que las Naciones Unidas adopten una posición más robusta y hagan cumplir sus resoluciones relativas al Sahara Occidental.
Una postura de esta índole pondría a la comunidad internacional en una mejor posición y contribuiría a que el pueblo saharaui pueda confiar en las instituciones internacionales.